Buscar:

18/4/08

Universidades libres: ¡estudia pirata!

Fuente: canalsolidario.org.

Licenciarte de forma gratuita o aprender nuevas maneras de relacionarte con el saber. Nuevos proyectos universitarios apuestan por el pensamiento crítico, la investigación colectiva y otras maneras de manejar y producir conocimiento.

La universidad entendida de la forma convencional es más lenta, cuando no reacia, a experimentar y asumir los cambios en cuestiones como la producción y la gestión del conocimiento, los nuevos modelos organizativos sociales, el desarrollo local o la independencia de los poderes públicos y de los intereses comerciales.

Conceptos como disciplina académica, relaciones institucionales, dependencia de organismos e instituciones no tienen cabida en las denominadas universidades libres o piratas que han surgido en todo el mundo en los últimos años. Lo que caracteriza a estas nuevas instituciones es una manera comunitaria, libre, autónoma y cooperativa de producir y concentrar información de dominio público.

“A mí lo que no me gustaba realmente cuando estudiaba en la universidad tradicional era el enfoque comercial o mercantil que ésta había adoptado en los últimos años. También se notaban mucho los intereses políticos y empresariales”, explica Paula Álvarez que se está especializando en software libre siguiendo los seminarios y talleres de la Universidad Nómada.

“Tiene hándicaps como son que las sesiones sean en aularios diferentes cada vez o que no tienes una atención tan directa de los ponentes, pero sin duda es una opción a la vanguardia en temas que a mí me interesan como el software libre o las alternativas a la mundialización”, comenta Paula. “Muchas personas piensan que como no obtienes un título oficial la formación no es de calidad, pero eso no tiene nada que ver. Yo he tenido por ejemplo sesiones con conferenciantes de nivel y auténticos gurús, como por ejemplo Richard Stallman”, añade.

Además de la Universidad Nómada, en el Estado español han surgido en los últimos años otras iniciativas como la Universidad Pirata de Barcelona, la Universidad Libre Experimental (ULEX) de Málaga o la más reciente Universidade Autónoma do Atlántico, asentada en el municipio gallego de Taragoña. Estas entidades agrupan colectivos educativos y culturales que sin ánimo de lucro apuestan por el desarrollo local.

“Vemos la educación y la investigación como una condición fundamental para salir de patrones de pensamiento y de comportamiento estancados, en una repetición perpetua”, explican desde la Universidad Pirata. “Queremos dotarnos de saberes que nos permitan analizar y responder a la realidad que nos rodea. Por eso nos urgía abrir un espacio donde aplicar el tratamiento riguroso de la academia a temas que en las propias instituciones quedan arrinconados por falta de interés del mercado”, añaden.

Aunque no existen cifras de los alumnos que pasan por las aulas de estos espacios, los responsables de su gestión afirman que las estadísticas no son lo más importante. “Estas universidades son espacios experimentales para que creadores y creadoras locales, movimientos sociales y culturales, la vecindad y la ciudadanía puedan desarrollar sus iniciativas y proyectos así como disfrutar de una amplia oferta cultural con entera libertad”, señalan desde la ULEX.

Las propuestas que se pueden encontrar en estos espacios van desde los clubs de lectura, literatura, teatro o música, hasta el ecologismo, la integración social, la educación para la salud, el desarrollo sostenible, el feminismo, las TIC, el software libre o los saberes tradicionales. Además, la formación suele ser gratuita o por un precio simbólico.

Trabajo en Red

Otros países de Europa y América tienen más tradición en cuanto a las fórmulas de las universidades piratas. Un buen número de estos espacios autónomos de educación e investigación comparten recursos y trabajan en red. Entre ellos destacan la Copenhagen Free University en proceso de reapertura, la University of Openess, la FreeUniversity of Los Angeles, la Toronto Anarchist Free University, la Informal University in Foundation, la Unilibre de Chile y la Manoa Free University, la Universidad Libre de México, las Université Tangente y Université Pirate, en Francia, la Göteborgs Autonoma Skolas o la Wikiversidad de la Fundación Wikimedia.

Las universidades libres y piratas pueden funcionar únicamente de forma online o estructurarse en escuelas, que agrupan entidades que comparten áreas de conocimiento, y campus, vertebrados territorialmente. La mayoría de universidades piratas, además, coinciden en reconocer a las universidades populares como sus precedentes en cuanto a estilo formativo y difusión cultural.

Universidades Populares, espacios de educación alternativa

Las Universidades Populares tienen su origen está en los movimientos obreros del siglo XIX en Francia y al Estado español llegaron a principios del siglo XX pero no consiguieron impulso hasta después de la dictadura franquista. Los primeros centros del Estado nacieron en Asturias y la UP de algunas ciudades, como la de Gijón que es una de las más activas, cuentan con un recorrido de más de 30 años y han sido claves a la hora de integrar temas como la inmigración o las nuevas tecnologías en la sociedad.

“En principio, estas iniciativas nacieron con una fuerte influencia ideológica de las Instituciones Libres de Enseñanza. Estos proyectos querían extender el saber”, explican desde la Federación Española de estas entidades (FEUP).

“Las hay de todo tipo, municipalistas o llevadas por entidades sin ánimo de lucro, pero todas tienen en común que apuestan por el desarrollo local, que buscan la participación de la sociedad y que ven la formación como una forma de mejorar la calidad de vida de los vecinos y las vecinas. Se intenta ofrecer cualquier actividad que interese a al ciudadanía y que no esté cubierta por otros servicios”, añaden los responsables de FEUP.

No hay comentarios: